jueves, diciembre 14, 2006

...Febrero 1, 2006...

…Son algunos días con la misma incertidumbre, con las mismas preguntas, y con la misma sensación de ansiedad. Ya no sé por qué me doy tantas vueltas en lo mismo, si ya tengo conciencia de todo, y en vano sería seguir mintiendo. Pensé que tal vez querrías algo más real, o al menos más sensato, y no tan superficial e impetuoso, pero no, nunca fue así. Y son tan largas las horas, y me río, porque nunca sentí tal desesperación, que de segundo a segundo se hace más intensa…no, a mi no me pasan esas cosas…pero las ironías en estos días son tan coincidentes en mi vida, que no me dejaré llevar por lo que siempre he querido de mi. No podría ser de otra forma, si nunca quise ser consecuente contigo, pero no sé de que forma comportarme si no sé que es lo que quieres, y no quiero molestar, y cada vez que siento que evitas los instantes que te dedico, me ahogan esos idiotas suspiros de no querer saberlo realmente, y si, todo se vuelve cada vez más confuso, porque ya habían ilusiones, antes que tu, y yo. Cada frase se enreda en latidos, rabia, besos, abrazos, y el resto…el resto a mi me queda, supongo.



…Varias veces me hablaron de eso, que es bueno dicen, que te hace ser más, que hasta puede cambiarte. No pensé que era así. No podría decir que se siente del todo bien, tal vez a ratos. Desespera, me deja sin aire, me devuelve luz y a la vez oscurece el camino.
Siento en la garganta un obstáculo que me impide respirar libremente porque a pesar de que no molesta, tengo conciencia de que está ahí. No me quiero aferrar con las ganas que tengo ahora, porque se siente tan fuerte que temo sea rápido y que cierre los ojos y ya no estés.
No quería decirlo de esta forma, pero me he sometido de la forma más bruta y torpe a la persona más completa que ha trascendido frente a mis ojos, quizá, lo esperaba y mis ganas de que llegaras, esa fuerza, hizo que pudiera encontrarte.
No quiero que amanezca nunca. Necesito encontrar antes del amanecer, más razones que las que tengo ahora para conservarte, y sé que hay mil maneras de hacer que te quedes, pero siento que la noche podría ganarme y caer antes que yo…

Ya no quiero sentirlo de esta forma, porque duele. Es tan molesto saber que hay infinitas formas de mirar cómo pasan los días, y no poder enseñarte de qué forma los miro yo, cómo son para mi los amaneceres mil veces en reversa, esos que te hacen sentir el vaho de quien esta a tu lado, ese olor tan agradable a la compañía, y que ahora sólo puede repudiarme, claro…porque ya no estas tan presente como antes. Porque ya tu camino no pasa por el mío, y porque ahora tus ojos buscan otros horizontes, los que alguna vez se entrelazaban con las líneas que se dibujaron impetuosas en mi mirada. Ya no ves el aire como yo, para ti es solo aire, y es triste saber que dices lo contrario, y que vas por la vida con el discurso del misticismo en el alma, y no has sido capaz de dilucidar que en la mía se ha disuelto a causa tuya, y ya no logro capturarlo, porque se fue en tu mirada, y se quedó en tus besos, esos que quedaron allá arriba… Ya no quiero despertar sabiendo que mis pies me llevan por inercia, y que mi mente aun sigue contigo y que ahí permanecerá al menos por un buen tiempo, que mis pasos siempre me llevarán donde mismo, y que tal vez, por esas casualidades de la vida estés aun ahí, aunque no sea por mi…
Me parecen tan largas las tardes que pasan como si fuesen completamente ajenas, que enrojecen y humedecen mis ojos cada vez que en mi retina se dibujan aquellos recuerdos…que quieres que piense, me hubiese encantado haber sido en tu vida algo más que un maldito instante, un momento, tan egoísta que no me permitió nada, más que sentir todo como una última vez,
y ver que detrás de los rostros que tanto engañan, no hay más que maldad porque aun no sabes como ser consecuente, y haz hecho todo dejando en mi camino de hojas secas, las espinas de siempre, esas que pensé ya no estarían más, y que aun me hacen sangrar los pies…ya no hay caminos confiables, mi fe se fue contigo…

jueves, noviembre 23, 2006

Mi locura


..."Ya no es poesía, no. Yo podía divagar y llegar muy lejos, aun sabiendo que era solo un juego mental... la eternidad jamás fue para mi un obstáculo...nunca. Yo creía que mi cabeza explotaría en cualquier momento. Eran tantas las ideas que chocaban unas con otras, que siempre tuve la sensación de estar en otra dimensión, viendo a veces muy claramente el color del sentimiento, podía hasta olerlo... otras veces en cambio fue todo oscuro, evasivo. He escuchado por ahi (no sé dónde) que le llaman locura, mas mi locura estaba convencida de que hallaría dirección... bueno, he aquí el asunto...
Recientemente he tenido unas ganas desenfrenadas de apuntar mi dirreción hacia ti. Dejando de lado la falsa modestia, creo nunca haber conocido a quien merezca el eterno instante de darle claridad a mis pensamientos, ilimitadamente, querer compartirlos.
Yo no creo, yo sé, que eres tu quien sabe como desatar este nudo de...(sensaciones?) extrañas, que me matan y reaniman cada vez que siento el karma en vida...
Estoy conciente de que lo que veo en ti es lo que quiero ver de ti, pero hay algo en tu aura que refleja en mi retina un camino (por cierto sin retorno) a tu forma de ver la vida... y ansío verla desde tus ojos"...



..."Yo podría dedicarte tantos momentos... tu no tienes idea"...


viernes, octubre 27, 2006

Narciso y Goldmundo



Nombre del libro: Narciso y Goldmundo
Autor: Hermann Hesse
Editorial: Edhasa


Comentario

El historial de Herman Hesse es un estigma en sus novelas. El hecho de ser el padre del existencialismo prepara e invita al lector a divagar en lo mas hondo del alma, y a encontrarse con las debilidades que repercuten en nuestro actuar, y que se va condicionando con ciertas fortalezas que vamos descubriendo a medida que reflexionamos de este mismo.

Esta novela, la de Narciso, la de Goldmundo, dos jóvenes que viven el mundo de forma intensa, revela la amistad, que no pide similitudes, mas bien une almas totalmente opuestas, las que la una a la otra, van alimentando dudas y afirmaciones, cuestionamientos de la vida, de la razón de ser, pero almas cuyo actuar es condicionado por la iglesia, al pertenecer ambos jóvenes a un convento, Narciso como joven y virtuoso profesor, Goldmundo quien por orden de su padre llega como erudito, para realizar estudios basados en el cristianismo.

Este joven Goldmundo, quien en su inocente alma no había descubierto su propósito, comienza a indagar en pensamientos que descubre al conocer a Narciso, quien llama su atención de una manera a mi parecer ambigua.
Esta ambigüedad por cierto, nace en ambos corazones, y se alimenta y va creciendo en base al afecto, a la intensidad de la entrega, a las ganas de reflejarse en el otro... he llegado a pensar que el estar coartados del amor por un opuesto, o por ese complemento, que es la naturaleza humana, y el hecho de ser jóvenes y vigorosos, hizo florecer ese amor ambiguo, que jamás fue explicito en la obra, mas de ella emanaban olores a enamoramiento...
El uno ve en si lo que no ve en el otro, y viceversa. Narciso, se sumerge en las ciencias y lo racional, mientras que Goldmundo, bebe de las pequeñas cosas de la vida, es artista innato...
Narciso despierta en Goldmundo la curiosidad por su pasado, por lo que condicionaba su presente, y que al no ser descubierto condicionaría su futuro... Y es así como ve que en la ausencia materna quedo parte importante de su vida, que debía descubrir, para poder determinarse a si mismo.

Este apoyo de Narciso, y esta forma de mostrarle distintas formas de mirar la vida, su vida, y lo que tenia de ella, hizo, a mi parecer, que la amistad tomara un color impredecible, y que lo ambiguo dedujera todo en ella...



...una vez hechos los lazos, no hay vuelta atrás, siempre son lazos...



Biografía

Herman Hesse nació en Calw el 2 de julio de 1877 y murió en Montagola en 1962. Hijo de dos misioneros Bálticos, Verlasgverein Johannes Hesse y Maria Gundert, vivió en Basilea de 1881 a 1886, después regresó a Calw hasta 1889. De 1890 a 1891 estudió en una escuela de latín para prepararse al examen de Würtemberg, necesario para el ingreso gratuito para estudiar teología evangélica de una fundación. En 1891 se fugó del seminario en el que había ingresado y en el que se sentía absolutamente reprimido en lo personal y en lo emocional al no poder ejercer entre sus muros su vocación de poeta. Ello provocó que le trataran de endemoniado y que la presión a la que fue sometido le empujara a un malogrado intento de suicidio (afortunadamente para las letras universales) e ingreso en un centro de neuropatía y enfermedades mentales. En 1893 acabó el bachilleratoy en 1894 entró a trabajar en una fábrica de relojes donde estuvo hasta 1895.Aprendió el oficio de librero con JJ Heckenhauer.Fue a partir de 1899 cuando comenzo su fulgurante carrera literaria desde la cual se iniciaría como periodista. .En 1901 hizo su primer viaje a Italia, en 1902 publicó unos poemas dedicados a su madre, la cual murió poco después de la publicación. En 1903 abandonó su trabajo en la librería y viajó por segunda vez a Italia. En 1904 publicó Peter Carmezind y se casó con María Bernoulli. En 1911 fué a la India. En la Primera Guerra Mundial tuvo una posición pacifista y liberal su no beligerancia le llevo a ser identificado con las fuerzas nacionalsocialistas de ocupación. Envidiado y criticado por algunos de sus coetáneos intelectuales Hesse permaneció en todo momento firme en sus convicciones e independencia de pensamiento. Posteriormente vivió en Suiza consiguiendo la nacionalidad en 1923. Ganó el premio Nobel de Literatura en 1946.



"No digas de ningún sentimiento que es pequeño o indigno. No vivimos de otra cosa que de nuestros pobres, hermosos y magníficos sentimientos, y cada uno de ellos contra el que cometemos una injusticia es una estrella que apagamos".

"El que quiere nacer, tiene que romper un mundo".
Herman Hesse





domingo, octubre 22, 2006

Allende


Para matar al hombre de la paz
para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla,
para vencer al hombre de la paz
tuvieron que congregar todos los odios
y además los aviones y los tanques.
Para batir al hombre de la paz
tuvieron que bombardearlo, hacerlo llama,
porque el hombre de la paz era una fortaleza.
Para matar al hombre de la paz
tuvieron que desatar la guerra turbia,
para vencer al hombre de la paz
y acallar su voz modesta y taladrante
tuvieron que empujar el terror hasta el abismo
y matar mas para seguir matando,
para batir al hombre de la paz
tuvieron que asesinarlo muchas veces
porque el hombre de la paz era una fortaleza.
Para matar al hombre de la paz
tuvieron que imaginar que era una tropa,
una armada, una hueste, una brigada,
tuvieron que creer que era otro ejercito,
pero el hombre de la paz era tan solo un pueblo
y tenia en sus manos un fusil y un mandato
y eran necesarios mas tanques mas rencores
mas bombas mas aviones mas oprobios
porque el hombre de la paz era una fortaleza.
Para matar al hombre de la paz,
para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla.
Para vencer al hombre de la paz
tuvieron que afiliarse siempre a la muerte
matar y matar mas para seguir matando
y condenarse a la blindada soledad.
Para matar al hombre que era un pueblo
tuvieron que quedarse sin el pueblo.

(Mario Benedetti)